Preparando el cumple
Este jueves es el cumpleaños de Alonso y hace ya unos días que estamos preparando la fiesta. Lo vamos a celebrar el sábado con la familia, auque el jueves le haremos una pequeña celebración en casa. El sábado, como parece que va hacer bueno lo celebraremos en casa de los abuelos (mis padres) que tienen jardín y se puede celebrar a lo grande.
Este sábado a Sandra le tocó trabajar (cosas de inventarios y demás). El caso es que Alonso y yo salimos de casa a la misma hora y le acompañamos al trabajo. Luego fuimos a una papelería especializada en decoración de cumpleaños y fiestas que hay en el centro. Nada más entrar me di cuenta de que la fiesta sería temática. Será una "Fiesta de Cumpleaños estilo Pocoyó". Es increible la cantidad de 'merchandising' que hay sobre Pocoyó desde que cotiza en bolsa. Pero la verdad es que el personaje lo vale. Para muestra no hay más que ver como se le abren los ojos (como platos) a Alonso cada vez que ve a un personaje de la serie o cada vez que escucha un par de notas de la sintonía.
Entre la gran oferta de productos de esta gama y que Alonso tiene una temporada en la que señala todo lo que le gusta con el dedo, la verdad es que fue sencillo escoger lo que nos llevamos: piñata Pocoyó, platos grandes Pocoyó, platos pequeños Pocoyó, 2 filas de banderillas de 3 metros de Pocoyó,... y además un Pocoyó articulado tamaño gigante (este último para decorar en su habitación). Ahora solo me falta bajarme la sintonía de la serie para poner en el momento de soplar las velas... bueno... la vela. ¡La Vela!. Ya sabía yo que se me olvidaba algo. Esta tarde tendremos que escoger vela. (Hasta la tarta, la hemos encargado con la forma de Pocoyó).
Esa visita a la papelería fue especial. No solo por la 'sobredosis' de Pocoyó, sino porque Alonso salió por primera vez en la tele. En un momento dado, cuando estabamos cargando la cesta de productos Pocoyó se escucho en el local: "¡5 y acción!" y de la nada aparecieron una camara un técnico de sonido, una presentadora y dos o tres personas más que salian en el reportaje.
Al principio no me gustó mucho la idea de salir en la tele calado hasta los huesos como estaba por la lluvia, así que salí un par de minutos del local y me quedé viendo el escaparate. Aunque aún seguía lloviendo estabamos resguardados por un andamio. Al poco tiempo vi que 'la gente de la tele' estaban al fondo de la tienda y ya no estaban grabando así que me decidí a entrar y continuar con mi compra.
Fue cuando estaba pagando cuando de repente se acerca todo el equipo de televisión y la presentadora se pone a hacerle gracietas a Alonso. "!Pero que niño más lindo! ¡¿Como eres tu tan lindo?!... Que bien vas ahí ¿eh?... Pero que risueño que eres..." Le decía la presentadora mientra Alonso le devolvía sonrrisas y le señalaba con el dedo. Mientras tanto, yo, intentaba pagar justo entre la cámara, la girafa (ese micro tan grande) y la escena de Alonso charlando con la presentadora. Con tan mala suerte que el terminal no fue capaz de reconocer mi tarjeta de crédito hasta el tercer intento. Supongo que fue por culpa de la humedad, o por mi manía de no querer llevar cartera, o por ambas cosas. Fue un momento tenso, si. Pero al final funcionó. Aunque bien pensado, estando Alonso en plano ¿quien se va a fijar en si yo pago con tarjeta o en efectivo?
Este sábado a Sandra le tocó trabajar (cosas de inventarios y demás). El caso es que Alonso y yo salimos de casa a la misma hora y le acompañamos al trabajo. Luego fuimos a una papelería especializada en decoración de cumpleaños y fiestas que hay en el centro. Nada más entrar me di cuenta de que la fiesta sería temática. Será una "Fiesta de Cumpleaños estilo Pocoyó". Es increible la cantidad de 'merchandising' que hay sobre Pocoyó desde que cotiza en bolsa. Pero la verdad es que el personaje lo vale. Para muestra no hay más que ver como se le abren los ojos (como platos) a Alonso cada vez que ve a un personaje de la serie o cada vez que escucha un par de notas de la sintonía.
Entre la gran oferta de productos de esta gama y que Alonso tiene una temporada en la que señala todo lo que le gusta con el dedo, la verdad es que fue sencillo escoger lo que nos llevamos: piñata Pocoyó, platos grandes Pocoyó, platos pequeños Pocoyó, 2 filas de banderillas de 3 metros de Pocoyó,... y además un Pocoyó articulado tamaño gigante (este último para decorar en su habitación). Ahora solo me falta bajarme la sintonía de la serie para poner en el momento de soplar las velas... bueno... la vela. ¡La Vela!. Ya sabía yo que se me olvidaba algo. Esta tarde tendremos que escoger vela. (Hasta la tarta, la hemos encargado con la forma de Pocoyó).
Esa visita a la papelería fue especial. No solo por la 'sobredosis' de Pocoyó, sino porque Alonso salió por primera vez en la tele. En un momento dado, cuando estabamos cargando la cesta de productos Pocoyó se escucho en el local: "¡5 y acción!" y de la nada aparecieron una camara un técnico de sonido, una presentadora y dos o tres personas más que salian en el reportaje.
Al principio no me gustó mucho la idea de salir en la tele calado hasta los huesos como estaba por la lluvia, así que salí un par de minutos del local y me quedé viendo el escaparate. Aunque aún seguía lloviendo estabamos resguardados por un andamio. Al poco tiempo vi que 'la gente de la tele' estaban al fondo de la tienda y ya no estaban grabando así que me decidí a entrar y continuar con mi compra.
Fue cuando estaba pagando cuando de repente se acerca todo el equipo de televisión y la presentadora se pone a hacerle gracietas a Alonso. "!Pero que niño más lindo! ¡¿Como eres tu tan lindo?!... Que bien vas ahí ¿eh?... Pero que risueño que eres..." Le decía la presentadora mientra Alonso le devolvía sonrrisas y le señalaba con el dedo. Mientras tanto, yo, intentaba pagar justo entre la cámara, la girafa (ese micro tan grande) y la escena de Alonso charlando con la presentadora. Con tan mala suerte que el terminal no fue capaz de reconocer mi tarjeta de crédito hasta el tercer intento. Supongo que fue por culpa de la humedad, o por mi manía de no querer llevar cartera, o por ambas cosas. Fue un momento tenso, si. Pero al final funcionó. Aunque bien pensado, estando Alonso en plano ¿quien se va a fijar en si yo pago con tarjeta o en efectivo?
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