La guardería de Alonso
La guardería a la que va Alonso es estupenda. Lo sospeché el primer día que fuimos a visitarla (a finales del año pasado) cuando vimos que los niños iban corriendo a darle un beso a sus profesoras antes de irse. Algunos, incluso protestaban porque querían quedarse más tiempo en clase cuando sus padres los iban a buscar.
Unos meses más tarde Alonso empezó a ir a esa guardería que, aunque no nos queda especialmente cerca de casa si que nos queda a mitad de camino entre el trabajo de Sandra y el mío. Esto supone unos 15 o 20 minutos más de coche en cada viaje de ida o vuelta al trabajo, pero también nos permite que lo pueda dejar Sandra y recoger yo. Incluso lo vamos a buscar al medio día para poder disfrutar de su compañía ese par de horas que tengo para comer (3 horas en el caso de Sandra).
La guardería en cuestión forma parte de una red de guarderías privadas que tienen experiencia desde hace más de 10 años en Coruña. Sin embargo, esta es nueva. Se innauguró en septiembre del año pasado (justo el mes que nacio Alonso), por lo que las instalaciones son impecables, modernas y nuevas. Por otra parte, el personal no es inexperto. Al contrario, vienen de trabajar anteriormente en otras guarderías del grupo.
Las profesoras de Alonso (María, Pepa y Susana) lo adoran y se nota que él se lo pasa bien con ellas. Simplemente os diré, para que os hagais una idea, que estoy más tranquilo cuando está con ellas que cuando está con sus abuelos.
De todas formas, gran parte de julio la guardería cierra por las tardes hasta agosto y en agosto cerrarán hasta el día 24, por lo que también disfrutará este tiempo de los mimos de los abuelos y tendrán tiempo para malcriarlo con caprichos que no se le debería consentir.
Unos meses más tarde Alonso empezó a ir a esa guardería que, aunque no nos queda especialmente cerca de casa si que nos queda a mitad de camino entre el trabajo de Sandra y el mío. Esto supone unos 15 o 20 minutos más de coche en cada viaje de ida o vuelta al trabajo, pero también nos permite que lo pueda dejar Sandra y recoger yo. Incluso lo vamos a buscar al medio día para poder disfrutar de su compañía ese par de horas que tengo para comer (3 horas en el caso de Sandra).
La guardería en cuestión forma parte de una red de guarderías privadas que tienen experiencia desde hace más de 10 años en Coruña. Sin embargo, esta es nueva. Se innauguró en septiembre del año pasado (justo el mes que nacio Alonso), por lo que las instalaciones son impecables, modernas y nuevas. Por otra parte, el personal no es inexperto. Al contrario, vienen de trabajar anteriormente en otras guarderías del grupo.
Las profesoras de Alonso (María, Pepa y Susana) lo adoran y se nota que él se lo pasa bien con ellas. Simplemente os diré, para que os hagais una idea, que estoy más tranquilo cuando está con ellas que cuando está con sus abuelos.
De todas formas, gran parte de julio la guardería cierra por las tardes hasta agosto y en agosto cerrarán hasta el día 24, por lo que también disfrutará este tiempo de los mimos de los abuelos y tendrán tiempo para malcriarlo con caprichos que no se le debería consentir.
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