Su juguete preferido
En los últimos meses han ido 'lloviendo' juguetes de todo tipo en casa. Todos cargados de un montón de cariño y con la esperanza de convertirse en los favoritos de Alonso. Que si un peluche de un perrito, que si otro más grande de un oso, que si otro más grande todavía de un... de... lo que sea ese animal. Y también juguetes más sofisticados que se mueven, que dicen cosas, que interactuan hablandole al bebé cuando los toca... otros que le enseñan los números, las formas, los colores. También están los juguetes con música, que merecerían un post dedicado a ellos. ¿Por qué todos tienen las mismas melodías? Y otros muchos juguetes cada cual más original.
Pero Alonso tiene sus propios gustos que no necesariamente se rigen por las reglas del marketing que nos dominan a los adultos.
Al principio le ibamos mostrando todos sus muñecos y juguetes, y él los miraba, pero en seguida se cansaba. En cambio, le fascinaba la pequeña luz roja de la cámara que tenía instalada en la cuna.
Según fue creciendo fue conociendo otros juguetes, pero curiosamente, lo que más le sorprendió fue darse cuenta de que la mano de papá estaba articulada. Así que, el gran entretenimiento era coger los dedos y doblarlos en todas las direcciones posibles.
Para dormir hubo un tiempo en el que Pocoyó era casi imprescindible. Pero Alonso fue creciendo y Pocoyó no. Un día, cuando ya se había quedado dormido, le dió un golpe a la barriga de Pocoyó y este empezó a 'cantar' una melodía y encendió su cara. A Alonso eso no le gustó mucho, así que lo cogió por un pie y lo tiró a los pies de la cuna. A partir de entonces la relación entre ambos no volvió a ser la misma. Se tratan, pero no es igual.
Pero hay un muñeco que parece que está resistiendo el paso del tiempo y que cada vez le gusta más. La verdad es que me sorprende que haya sido este, pues no hace ruido, no lleva pilas, no emite luz. Es simplemente un muñeco de trapo articulado con una estructura de alambres y relleno de distintas texturas. Se trata de Loula la perrita de Pocoyó. La reconoce y le sonríe cada vez que aparece en su campo de visión. Se gira en todas las direcciones para buscarla cuando le preguntamos "¿Donde esta Loula?". Y tiene una gran afición a chuparle las orejas. Además, he notado que es su personaje favorito en los dibujos animados.
Tecnicamente no es una gran foto, pero me gusta como se cruzan las miradas:
6 comentarios :
jajaja que gordito esta Alonso!! la verdad que les suelen gustar las cosas mas sencillas.Alba prefiere el mando de la TV,las bolsas,las botellas de plastico jejejeje osea lo q no debe tocar!!!
Es terrible, la cantidad de dinero gastado en jugetes que JAMÁS despiertan interés más que por un par de minutos.
En cambio dale una caja de cartón cerrada. O una botella. O un carrucho de cable!
Ahora, con mi hijo un un conejo, también de OREJAS grandes que lo volvía loco.
Has vuelto a coger carrerilla, eh? A Miguel le encanta Pocoyó pero nunca le compramos a Loula ni a Eli, ya casi no le hace caso. Los niños crecen... demasiado rápido.
Besos
El peluche preferido de mi Inesita se llama Adela; excepto yo, que lo llamo Cari.
Como es tan pequeñita, la mayor parte del tiempo se dedica a vigilarlo, cuando se cruzan las miradas a sonreirlo y siempre, siempre A QUERERLO.
Por supuesto, también es uno de mis dos peluches preferidos.
Encontre este blog buscando algo que me informara de los dolores de contracciones que estaba sintiendo..me entretuvo tanto que se me olvidaron las contracciones!!
Tu bebe es hermoso.. me emocione con muchas cosas que lei.. lo que es yo estoy con mucho miedo al parto.. estoy con 38 semanas de embarazo.. bueno les deseo lo mejor y estare leyendo este nuevo blog que encontre muy pero muy interesante :)
Bonito está Alonsito
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