18 semanas

25 abril Jesús 0 comentarios

Esta semana es la primera de una serie de gran actividad para el bebé. Se mueve constantemente. Aunque (salvo las dos ocasiones que comenté) Sandra no ha notado nada especial que le hiciese pensar que sentía movimientos, lo cierto es que ya tenemos constancia de que se mueve (y mucho). Gracias al doppler casero, cuando escuchamos sus latidos nos pasamos un rato buscando el lugar donde mejor se oye. Una vez que lo encontramos no tarda en desplazarse. Además están los pequeños golpes y rozaduras que se vienen escuchando desde hace un par de semanas. Que notamos claramente distintos a los sonidos de movimientos de vísceras que ya escuchábamos antes.

Por otra parte el tamaño al empezar esta semana es de unos 14 cm y el peso entre 150 y 200 gramos.

Además, al interesarme por lo que ocurre en esta semana, he aprendido lo que es el meconio. Se llama meconio al primer excremento del bebé, que según La biblia del embarazo "ahora ya se empieza a acumular en su intestino". Esto me ha parecido demasiado escatológico e incluso de mal gusto. Pero además me confunde un poco. Porque... a ver... los bebés antes de nacer ¿son muy estreñidos? ¿o no?. De pronto he empezado a comprender que el parto no va a ser algo tan aséptico como lo pintan en las películas.

Es previsible que de ahora a cuando le hagan la próxima ecografía el día 14 de mayo haya crecido al menos un par de centímetros y unos 75 gramos más.